A mediados de febrero, el Gobierno de España realizó un aumento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) para 2023, elevándolo a 1.080 euros mensuales. Entre los beneficiarios de esta subida se encuentran los empleadas del hogar, quienes no están sujetas a ningún convenio colectivo y reciben el SMI directamente.
En 2023, una empleada del hogar contratada a tiempo completo, es decir, 40 horas semanales, deberá recibir un salario mínimo de 1.260 euros, correspondiente al SMI anual repartido en 12 pagas. En términos horarios, esto equivale a un salario bruto por hora trabajada de 7.875 euros, calculado al multiplicar el precio por hora de trabajo por el número de horas trabajadas.
Nuevo salario para empleadas del hogar
La tabla salarial de las empleadas domésticas ha experimentado una mejora de 31,50 euros al mes con respecto a las del año pasado. Además del salario, estos profesionales tienen derecho a disfrutar de vacaciones pagadas. El trabajador debe pagar una parte de la Seguridad Social de la empleada del hogar, que actualmente corresponde al 23,6% del salario bruto de la trabajadora.
Otra ventaja que tendrán las empleadas del hogar con la subida del SMI es que cotizarán bajo el Régimen General de la Seguridad Social, lo que les permitirá acceder a las prestaciones por desempleo del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) en caso de perder su trabajo.
En qué consiste el empleo del hogar
El empleo del hogar se refiere a la contratación de una persona para realizar tareas domésticas en una residencia particular, como limpieza, cocina, cuidado de niños, cuidado de personas mayores o discapacitadas, entre otras. Es un trabajo que se lleva a cabo en el ámbito privado, por lo que no está sujeto a los mismos convenios colectivos que otros tipos de empleo. En España, el empleo del hogar está regulado por la Ley de Empleo del Hogar, que establece las condiciones laborales y los derechos de las empleadas del hogar.
El empleo del hogar lo ejercen personas que se dedican a prestar servicios domésticos y de cuidado de personas dentro del hogar de otra persona o familia. En general, se trata de trabajadores/as que realizan tareas de limpieza, cocina, planchado, cuidado de niños/as, atención a personas mayores o enfermas, entre otros. Es importante mencionar que la mayoría de los empleados del hogar son mujeres, aunque también hay hombres que desempeñan este trabajo.
El empleo del hogar puede ser físicamente exigente, ya que puede implicar la realización de tareas como limpieza, cocina, lavandería, planchado, cuidado de niños y ancianos, entre otros. Además, las empleadas del hogar a menudo trabajan solas en la casa del empleado, lo que puede ser un factor de estrés y aislamiento. Sin embargo, la experiencia de trabajo en el empleo del hogar puede variar dependiendo del tipo de tarea, el empleado y el ambiente laboral. Es importante destacar que todas las empleadas domésticas tienen derecho a condiciones laborales justas y seguras, así como a protección social y a un salario adecuado.